Si buscás una torta cremosa, suave y con ese dorado irresistible en la superficie, la torta vasca de queso es la elección perfecta.
De origen español, esta delicia es una mezcla entre una cheesecake y un flan, con una textura fundente (consistencia muy suave y cremosa) que se derrite en la boca.
Ideal para acompañar con un café o para lucirte en cualquier reunión.
¿Qué vas a necesitar antes de cocinar?
Los utensilios ideales para hacer esta receta son:
- Molde desmontable de 22 cm.
- Papel manteca.
- Una cuchara de madera para revolver.
- Un bol grande para mezclar.
- Un colador fino para tamizar la harina.
Ingredientes para torta vasca
- 600 g de queso crema (lo ideal para esta receta es que sea uno bien firme)
- 4 huevos
- 200 g de azúcar Chango
- 250 ml de crema de leche (más de 35 % de materia grasa)
- 1 cda. sopera de harina 0000 (o almidón de maíz Chango si querés hacerlo sin TACC)
- 1 cdita. de esencia de vainilla
- 1 pizca de sal
Preparación de la torta vasca
- Rinde 8 porciones
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocción: 40 minutos
- Precalentar el horno a 210 °C.
- Forrar un molde desmontable de 22 cm de diámetro con papel manteca humedecido y arrugado, cubriendo la base y los bordes.
- Mezclar el queso crema con el azúcar Chango en un bol hasta integrar todo, sin batir en exceso para evitar incorporar aire.
- Abrir los huevos en un recipiente aparte y por separado para detectar que estén en buen estado. Luego, agregarlos a la preparación mezclando suavemente después de cada adición hasta obtener una mezcla homogénea.
- Incorporar la crema de leche y la esencia de vainilla. Seguir mezclando hasta integrar todo.
- Tamizar la harina (o el almidón de maíz) y la sal, e incorporarlas con movimientos envolventes a la mezcla, sin sobrebatir.
- Volcar la mezcla en el molde preparado y dar unos golpecitos suaves sobre la mesada para eliminar burbujas grandes de aire.
- Hornear durante 40 a 50 minutos, hasta que la superficie esté bien dorada y el centro aún tiemble ligeramente al mover el molde. No abrir el horno antes de los 35 minutos.
- Retirar la torta vasca del horno y dejar enfriar a temperatura ambiente dentro del molde. Luego, llevar a la heladera por al menos 4 horas (idealmente toda la noche).
- Desmoldar con cuidado y servir bien fría. La textura debe ser cremosa, con centro suave y superficie rústica y dorada.
¡Y listo! A disfrutar en casa.
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